Precauciones en segundas viviendas

Ahora que estamos en pleno invierno, y por lo general no se hace uso de las segundas viviendas, es un buen momento para recordar algunas recomendaciones que los cerrajeros profesionales en Avilés nos comunican para evitar problemas en nuestras viviendas de vacaciones, ya que las solemos dejar un poco olvidadas y se convierten fácilmente en un objetivo perfecto para todos aquellos individuos que se dedican a aprovechar la situación y hacer daño.

Por eso, hoy queremos recordar algunos consejos que tanto la policía como los expertos en abrir puertas (y no nos estamos refiriendo a los ladrones…) nos dan muy a menudo y que nos ayudarán a evitar sorpresas la próxima vez que nos acerquemos a nuestra segunda residencia.

No llamar la atención

Ese es, sin lugar a dudas, el mejor consejo que se puede dar. Colocar una puerta muy vistosa y diferente a la del resto de las viviendas de alrededor solamente atraerá la atención y le indicará a los ladrones que dentro hay algo de valor que merece la pena robar.

Muchos cerrajeros de Avilés y zonas cercanas como Salinas, en la que las urbanizaciones de vacaciones son bastante abundantes, destacan el hecho de que en la mayoría de las ocasiones en las que se han encontrado con un servicio en el que tenían que atender una puerta forzada, esta era muy distinta a las puertas que había en los alrededores.

Lo mejor es que en caso de querer cambiar la puerta por seguridad, se busque un modelo que sea lo más parecido a la puerta original, o que en lugar de eso se cambie la cerradura por otra que incremente la seguridad de la puerta, como alguno de los nuevos modelos que existen en el mercado y que están diseñados para impedir que métodos como el tan utilizado bumping sean efectivos, algo que en la actualidad afecta a más del ochenta por ciento de las cerraduras que hay en las viviendas.

Cerrar la puerta

Sí, no nos estamos volviendo locos. Por cerrar la puerta nos referimos a echar la llave y dejar bien cerrada toda la puerta, algo que evidentemente hacemos cuando no vamos a estar durante bastante tiempo.

No obstante, algunas veces hay vecinos que piensan que por estar dentro de un bloque de edificios no es tan importante dejar la puerta bien cerrada, lo que facilita la labor de ladrones, que pueden abrir enseguida una puerta a la que no se le ha echado al menos una vuelta de llave.

Contar con alguien de confianza

Muchos cerrajeros Alicante se encuentran con que no pueden recurrir a nadie en un bloque de viviendas porque solo se acercan los vecinos en vacaciones. Estos bloques son un verdadero filón para las bandas de delincuentes, ya que suelen contar con poca o ninguna vigilancia, y es muy fácil identificar cuáles son las viviendas que permanecen vacías durante meses, bien sea porque las puertas acumulan polvo o porque los buzones se llenan de publicidad.

Para evitar dar estos detalles, lo mejor es poder contar con alguien de confianza que de vez en cuando se pase a recogernos el correo o tirar todos los papeles, abrir y cerrar de vez en cuando las persianas (preferiblemente a horas distintas) y limpiar un poco.

Hay personas que viven de manera permanente en estos bloques a quienes no les importa hacer este favor a algún vecino, mientras que otras hacen un poco el trabajo de “porteros” y por un pequeño pago están dispuestos a hacerlo. Si en tu lugar de veraneo no tienes a nadie de confianza, como un familiar o un amigo, tal vez esta sea una buena manera de ahorrarte disgustos.

No escondas llaves

Nada de dejar la llave de casa dentro de una maceta, ni debajo, ni en alguna grieta ni en una piedra. Cualquier ladrón sabe interpretar los puntos en los que es posible localizar una llave de repuesto “para imprevistos”, así que no dejes ninguna cerca.

En urbanizaciones que cuentan con portero físico o personal de seguridad, es posible dejar una copia de la llave en la garita, algo habitual para hacer frente a algunos problemas como cuando por ejemplo hay una fuga de agua o algún otro asunto similar.

En aquellos lugares en los que no se cuenta con personal, o se deja una llave en casa de alguien de confianza o simplemente nos aseguraremos de que llevemos nuestra copia cuando vayamos allí para pasar un fin de semana o tengamos de nuevo vacaciones.

En invierno, las segundas residencias con el lugar preferido para entrar a robar. Procura que la tuya no sea una de las víctimas.